sábado, 13 de octubre de 2007

CLICK CLACK CLOCK



Dicen que hay personas que nacen con estrella y otras que nacen estrelladas,también hay personas que permanecen con el corazón intacto
y a otras que se lo parten miles de veces a lo largo de su vida.
Yo debí de nacer con el corazón roto...debí enamorarme del medico que me ayudo a nacer,y fue el primero en romperme el corazón
con su negativa,que mis berridos se escuchaban en todas las plantas por abajo y por arriba.
Nací con el corazón roto,la mala suerte inscrita en la frente y el dolor corriendo por mi venas.
La soledad como consigna y lema y la osadía de ser otra persona distinta
de la que decidieron programar al principio de mi consciencia.
Nací con los latidos contados,los sentidos amarrados y la mala suerte agarrada a mi culo
como una tremenda condena.
Nací con la lapa de la fealdad maquillada en el rostro y agarrada de carne flácida a mis caderas.
Nací con el exit encendido incluso antes de cruzar la puerta de entrada.
Soy la última hija de Bernarda Alba,el grito silenciado por el contrato de la vida,
la que llora detras de las sonrisas,y lleva escrita a fuego en la espalda la canción
de la desidia.El último residuo del que nadie se acuerda,la niña arrinconada en la esquina
la voz del silencio,el sentimiento invisible que nunca asoma.
El final de la autoestima que nunca quiso instalarse en mi vida,
que se reía hasta de mi sombra por ser una tullida.
Soy la tristeza de la mala suerta andante
personificada en toda una vida,
el desastre de sentimientos constante,
el muro de lamentaciones distantes
y la viga del desdoblamiento vibrante
que me arrastra hasta el principio de la era
donde el primer ser andante que la criatura cegada
por la nueva vida vió,le dió su primer pìsotón
y acabó con su pequeño motor de emociones,
ese pequeño corazón que hizo click,clack,clock
la niña no lloraba de alegría por venir al mundo
lloraba de tristeza porque ante ella
se presentaba una larga vida sin corazón.

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